Biankikis
En esta época de grandes avances tecnológicos el sector editorial tiene un trabajo arduo para fortalecer su industria; por tal motivo se realizó en el 2007 un estudio prospectivo organizado por el CERLALC (Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina) y el Convenio Andrés Bello (CAB) con la finalidad de establecer lineamientos generales tanto para decisiones públicas y privadas.

La tarea principal de los organismos antes mencionados son las siguientes: para el CERLALC es el desarrollo e integración de América Latina a través de la construcción de sociedades lectoras; mientras que el CAB contribuye a ampliar y fortalecer el proceso dinámico de la integración de los Estados en ámbitos de educación, tecnología, ciencia y cultura. El estudio inicia con el grupo ANCLA, con representantes del sector público y privado de siete países: Argentina, Colombia Chile, México, Panamá, Perú y Venezuela. Durante el 2008 se realizaron tres reuniones: Febrero (Bogotá), Agosto (Sao Paulo) y en Noviembre (Santiago de Chile).

Como primeros avances del mencionado estudio se arrojan las siguientes cifras: En América Latina hubo 99,000 títulos nuevos en el 2006; mientras que en España se editaron 62,820 títulos nuevos en el 2005. Por lo tanto entre el 2003 y el 2006 se dio un crecimiento en la cantidad de editoriales industriales del 32%. El 74% de las editoriales en AL (América Latina) registró una producción anual menor a 20 títulos y sólo un 2% más de cien. Las empresas españolas tienen 162 filiales en el mundo distribuidas en 28 países; la inmensa mayoría en AL (132). México 30, Argentina 18, Chile 12 y Colombia 11.

Ahora hablando de ventas de ejemplares, México presentan un descenso del 1,5% en el 2006, mientras que España presenta un descenso del 1%. Solamente Colombia y Brasil registraron un incremento, el primero de 2.4% y el segundo alrededor del 14%, esto se debe principalmente al desarrollo económico que han tenido estos países en los últimos años.

Hasta aquí no se vislumbra otro problema que sin duda es de gran interés Las nuevas tecnologías vs Acceso tradicional del libro. Esto es, la posible democratización del libro con ayuda de las nuevas tecnologías; sin embargo están en juego también los derechos de autor y las regalías. Además no podemos olvidar que el acceso a la red no es precisamente el acto más democrático existente pues en América Latina es sólo del 23%, mientras que en España es del 62% y Estados Unidos con un 73%. No podemos creer ciegamente que las nuevas tecnologías desplazarán el acceso tradicional del libro ya que la mayoría de las poblaciones no cuentan con el acceso a la red. Y otro punto importante y puede que hasta cursi, es mejor leer un libro de forma tradicional que por medio de una computadora, bueno en mi humilde opinión.

Retomando el estudio mencionado en párrafos anteriores, los resultados arrojados brindan un estado probable del futuro del libro, es decir, tanto la producción como las prácticas de lectura quedarán en un punto intermendio entre lo analógico y lo digital. De esta forma el editor evoluciona porque producirá libros en formatos novedosos pero conservando los métodos tradicionales.

Supongamos que todo se da como ya se explicó, sin lugar a dudas las librerías tendrían que fortalecerse para no caer, por lo tanto el estudio propone ofrecer una atención profesionalizada, mantener un acervo extenso, ampliar el catálogo de servicios y adquirir el valor de centros culturales para obtener el apoyo del Estado.

Ya por último, el estudio propone un escenario "muy soñador" para el 2020 en donde se pretende lograr la incorporación del sector editorial a las nuevas tecnologías; por lo tanto, muchos contenidos serán adaptados a los nuevos soportes, además obtener que la tasa de potenciales lectores deberá aumentar debido al mayor cubrimiento de la escolaridad en la región y como consecuencia el analfabetismo en todos sus tipos desaparecerá. Asimismo, los gobiernos habrán realizado esfuerzos sustantivos para que su población tenga mayor acceso a la Red, disminuyendo así la Brecha Digital. Algo que sin duda se ven muy muy lejano aunque no debemos perder las esperanzas.
Biankikis
¿Cuántas veces pensamos que las nuevas tecnologías desplazan nuestros instrumentos de uso cotidiano? Yo no lo creo así, aunque a veces lo haya pensado, puesto que las considero un complemento con las ya existentes. Tal es el caso del libro, que a pesar de ya encontrar algunos en formato digital no ha logrado hacerlo desaparecer de forma impresa.
Claro está que la industria editorial se ha enfrentado a varios problemas para poder mantenerse y uno de los principales problemas es el apoyo financiero por parte de los gobiernos y la existencia de nuevas tecnologías por medio de las cuales se pueda acceder a fuentes de conocimiento que no sea sólo el libro. Sin embargo, esto no ha sido motivo suficiente para que el libro desaparezca sino que la industria tome en cuenta la posibilidad de usar, incluir y complementarse con las nuevas tecnologías en las diferentes etapas del proceso de producción, distribución y venta de un libro.

Umberto Eco nos brinda una reflexión sobre el futuro del libro inmerso en el ambiente de las nuevas tecnologías en un artículo donde hace interesantes planteamientos al respecto. Así, en su primer planteamiento refuta la idea de que “algo mata algo” y lo fundamenta con un ejemplo mítico de la invención de la escritura.

De acuerdo con Platón (en el Fedro), Thot o Hermes quien es el presunto inventor de la escritura presenta su invento al faraón Thamus, describe su nueva técnica (la escritura) como aquello que permitirá a los hombres recordar lo que otros olvidaron. Sin embargo, el faraón no quedo satisfecho porque pensaba que la memoria es un gran don que debe preservarse mediante continuo entrenamiento y con la nueva invención la gente no estaría obligada a forzar la memoria y sólo recordarían por virtud de un agente externo y no por un esfuerzo interno.
Con la cita anterior se entiende a la escritura como una nueva tecnología (de aquella época) misma que podía desplazar la memoria humana; sin embargo no es así, más bien la complementa, a veces nuestra memoria nos traiciona y es bueno tener herramientas como la escritura y la lectura que nos recuerden aquello que olvidamos o bloqueamos por algún motivo.
Está más que claro que el texto de Platón se manifiesta en contra de la escritura, pero como tal lo menciona Umberto Eco: “el que piensa realmente no requiere libros que piensen por él”. Y en efecto los libros no piensan por nosotros, es más, nos brindan planteamientos e información que pueden provocar nuestro esfuerzo mental para entender y sobre todo conservar la información que se nos está brindando por ese medio.
Así, y por lo antes mencionado al principio, las nuevas tecnologías no están para desplazar ningún tipo de herramienta, sino más bien para complementarlo como en la industria editorial, ya sea con la mejora de los procesos, un mejor acceso y sobre todo el incremento de lectores. Además ya es responsabilidad de cada uno mantener nuestra mente activa y dejar de lado la pereza mental.
El segundo planteamiento de Umberto Eco es sobre las imágenes contra la cultura visual; nos menciona que una pantalla de computadora contiene más caracteres alfabéticos que imágenes, pero yo no locreo así, pues la computadora está llena de imágenes, ya sea los íconos de los programas o demás o las que nosotros podemos almacenar en el disco duro.
El siguiente planteamiento “libros contra otros apoyos” describe como ambos tiene sus ventajas y desventajas, pero el libro sigue ganando puesto que las mismas computadoras alientan la producción de material impreso desde el manual de uso hasta textos más complejos.

Una de las principales ventajas del libro es su durabilidad en comparación con los soportes digitales, pues si bien muchos estamos conscientes que los virus hacen estragos en nuestras máquinas, Sin embargo y algo a favor de las computadoras la distribución de libros digitales puede significar una ventaja cultural por el gran alcance de publicación y comunicación, por eso el reto para la producción de libros es saber incluir los nuevos avances tecnológicos en los que la publicación vía internet no perjudique a la industria editorial, sino sea un complemento para los lectores que pueden leer un libro de forma digital o análoga.

Ahora, una ventaja de la computadora es el hípertexto mismo que es abierto a un sin fin de combinaciones y es sabido que con éste se puede transformar al lector en autor, y cada usuario puede agregar o aplicar algo extra, el asunto es la habilidad de trabajar con enlaces.
Por último Umberto Eco nos deja como reflexión que depende de nosotros como manejar los nuevos lenguajes y/o conocimientos con apoyo de las nuevas tecnologías y claro está que los libros seguirán siendo indispensables por nuestro ritmo y modo de vida y convivencia en la sociedad.